Cáncer del concreto: ¿Qué es y cómo prevenirlo con la tecnología Krystol?
El concreto es el material más utilizado en la construcción, debido a su resistencia, durabilidad y versatilidad.
Sin embargo, el concreto también está expuesto a diversos factores que pueden deteriorarlo y reducir su vida útil,
como la humedad, los agentes químicos, las cargas, las fisuras y el clima.
Uno de los problemas más graves que afectan al concreto es el llamado cáncer del concreto, que consiste en la corrosión
de las armaduras de acero que se encuentran dentro del concreto y que le dan soporte y estabilidad.
Esta corrosión se produce por la penetración de agua y cloruros al interior del concreto, que reaccionan con el hierro y f
forman óxidos que ocupan más volumen que el metal original. Esto genera presión y fisuras en el concreto, que facilitan
el ingreso de más agua y cloruros, acelerando el proceso de corrosión.
El cáncer del concreto puede provocar graves consecuencias, como la pérdida de resistencia y rigidez del concreto,
la deformación y el agrietamiento de las estructuras, el desprendimiento de fragmentos de concreto y el colapso de las obras.
Además, el cáncer del concreto representa un riesgo para la seguridad de las personas y el medio ambiente, así como un alto
costo de reparación y mantenimiento.
Para prevenir el cáncer del concreto, es necesario proteger al concreto de la humedad y los cloruros, mediante el uso de
materiales y técnicas adecuadas. Una de las soluciones más efectivas y novedosas es la tecnología Krystol, desarrollada
por la empresa Kryton, que consiste en un tratamiento cristalino aplicado en superficie o incorporado en la mezcla del concreto,
que lo transforma en una barrera impermeable al agua y los contaminantes hidrosolubles.
La tecnología Krystol se basa en la reacción química entre el agua y las partículas no hidratadas del cemento, que forma millones
de cristales en forma de agujas, que obturan los poros y conductos capilares del concreto, bloqueando el paso del agua y los cloruros.
Además, la tecnología kristol tiene la capacidad de auto sellar las fisuras que se puedan producir en el concreto, hasta un ancho de 0.7 mm,
mediante la reactivación de los cristales en presencia de humedad.
La tecnología Krystol ofrece múltiples beneficios, como:
Efectividad contra la presión hidrostática de hasta 140 m de columna de agua.
-Durabilidad y confiabilidad superior a las membranas y recubrimientos impermeabilizantes tradicionales.
– Integración al concreto, sin riesgo de daño o deterioro.
– Impermeabilización permanente, que se reactiva con la humedad.
– Bajos costos de impermeabilización en el corto y largo plazo.
– Aprobación para el contacto con agua potable, certificada por NSF de acuerdo al Estándar 61.
– Protección contra el ataque de cloruros y la corrosión del acero de refuerzo.
– Protección contra el ataque ácido y biológico en estructuras de drenaje.
– Aplicación al concreto a edades tempranas, durante el desarrollo de resistencias.
– Fácil aplicación y excelente costo-beneficio de instalación.
– Disponibilidad en color gris o blanco.
La tecnología Krystol se puede aplicar en diversos tipos de obras de concreto, como losas de cimentación, muros y losas, estructuras marinas,
fosos de elevadores, estacionamientos, albercas y estructuras con agua, tanques elevados, cisternas y depósitos de agua, túneles, tuberías y
bóvedas subterráneas, plantas de tratamiento de aguas, puentes, losas de rodamiento y rampas, techos y terrazas.
En conclusión, el cáncer del concreto es un problema serio que afecta la integridad y la durabilidad de las estructuras de concreto, y que requiere
de medidas preventivas para evitar su aparición y propagación. La tecnología Krystol es una de las mejores alternativas para impermeabilizar y
proteger al concreto de la humedad y los cloruros, mediante la formación de cristales que sellan los poros y las fisuras del concreto, y que garantiza.